EUROPA: El ejército sirio ya se atribuye la victoria en Alepo y celebra mientras se combate en los últimos barrios rebeldes
INTERNACIONALES, PORTADA 7:30
EUROPA: Las fuerzas del dictador Bashar al Assad aseguran que
controlan el 99 por ciento de la ciudad. La ONU mostró su consternación por los
reportes de “atrocidades” de civiles, y Rusia rechazó la propuesta
estadounidense de instalar corredores humanitarios de salida en los distritos
asediados
El ejército sirio y sus
aliados tomaron el martes el control de los distritos de Alepo que los rebeldes
abandonaron durante su retirada de la ciudad, y la batalla se encuentra muy
cerca de terminar, señalaron fuentes militares citadas por AFPy Reuters.
Ciudadanos que apoyan al régimen de Bashar al Assad salieron a las calles de la
ciudad para celebrar el inminente triunfo sobre los insurgentes.
"Estamos
en los últimos momentos antes de la victoria", confió un
responsable militar en Alepo, donde el lunes por la noche ya se habían
disparado tiros de júbilo en los barrios gubernamentales. El lunes, las últimas
defensas rebeldes habían colapsado para dar paso al ejército del presidente
Bashar al Assad, que avanzó a través del último
bastión de resistencia, y los rebeldes se trasladaron a sus
tres distritos a orillas del río Queiq.
En total, las fuerzas del régimen dicen
controlar el 99 por ciento de la ciudad y haber encerrado a los últimos
opositores en un territorio muy reducido. Los combates continúan este martes en los pocos barrios
que siguen dominados por los opositores en el este de Alepo, como Al Ansari
Oriental, Al Mashad, zonas de Seif al Daula y Ard al Sibag. Según la agencia
oficial Sana, miles de familias abandonaron los barrios asediados del este en
dirección a áreas en poder de las autoridades.
Si bien los militares sirios señalaron que
los opositores al régimen estaban huyendo
"en pánico", fuentes entre los rebeldes informaron
que se había establecido un nuevo frente tras la retirada. La noche del lunes
estuvo repleta de festejos en la zona de Alepo, controlada por el gobierno, el
cual prácticamente ya se atribuyó la victoria. Pero el drama de los refugiados
continúa y miles seguían escapando de los últimos combates.
La Cruz Roja Internacional lanzó un
comunicado pidiendo a todos los bandos que se respetaran las vidas civiles. En
tanto, el Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, se mostró alarmado por
reportes de atrocidades
y fusilamientos en
el rápido avance del Ejército "contra un gran número" de civiles. "Es
el infierno", resumió la organización de socorristas de
los Cascos Blancos, que opera en los barrios de la rebelión.
En tanto, diplomáticos de los Estados Unidos
se reunieron con representantes rusos para intentar formalizar un alto al
fuego que permita a los rebeldes y civiles abandonar la ciudad, pero no hubo
éxito.
El ministro ruso de
Exteriores, Serguéi Lavrov, rechazó
la propuesta de declarar un cese de hostilidades para crear corredores de
salida para los
civiles de la parte oriental de Alepo. "Ya hemos aprendido que eso
significaría que los extremistas obtendrían nuevamente una oportunidad de
descanso", dijo el canciller ruso ante laLos insurgentes de Alepo
comenzaron a perder terreno cuando el ejército, apoyado por combatientes
iraníes y por el grupo terrorista Hezbollah, lanzó una campaña fulgurante, el
15 de noviembre, para recuperar la parte oriental de la ciudad. En cuatro
semanas, la operación militar ha costado la vida a más de 415 civiles en el este de la ciudad. Por su parte,
la ONU reportó que sólo este lunes las fuerzas sirias mataron a por lo menos 82 civiles.
La conquista total de
Alepo, dividida desde 2012, permitiría al régimen de Al Assad
controlar las cinco mayores ciudades de Siria, con Homs, Hama,
Damasco y Latakia. Un giro que no hubiera sido posible sin la ayuda de Moscú,
aliado inquebrantable de Damasco.