Constructura española Sacyr retoma las obras del canal de Panamá
MUNDO 17:33
El administrador de la ACP, Jorge Quijano, reveló la semana pasada que la clave del arreglo está en que la aseguradora Zürich acepte inyectar 400 millones de dólares, que están como fianza de cumplimiento. Este dinero se convertiría en un préstamo al GUPC. La otra clave consistiría en conceder una moratoria al Grupo para un repago por 748 millones de dólares (545 millones de euros) que le anticipó la Autoridad.
Panamá.(DD) Centenares de obreros han retornaron a sus puestos de trabajo para reanudar las obras de ampliación del Canal de Panamá, tras estar paralizadas durante quince días. El consorcio adjudicatario de las obras, liderado por la constructora española Sacyr, y la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) llegaron a un preacuerdo para retomar las obras paralizadas desde el pasado cinco de febrero.
El Grupo Unidos por el Canal (GUPC), cumplía así uno de los puntos del pacto preliminar alcanzado el martes. Ahora le toca mover ficha a la ACP, según una nota informativa suya. “Tan pronto sean reiniciados los trabajos, remitirá” al Grupo un total de 36,8 millones de dólares (26,8 millones de euros) “correspondientes a trabajos facturados de diciembre, con el objetivo de que los trabajadores de GUPC cobren su quincena pendiente, y además se haga frente a otras obligaciones con proveedores”.
“Un grupo importante de trabajadores, no su totalidad, ha empezado a laborar este jueves. Hay un compromiso del Grupo para pagarles salarios y la Autoridad dará un desembolso”, ha explicado Norberto Valencia, portavoz del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares. Otro dirigente sindical, Héctor Hurtado, ha afirmado: “Estamos esperando el pago de todos los salarios de los trabajadores”. Hurtado se ha mostrado satisfecho por la noticia del reinicio de las obras.
Después de cuarenta y cuatro días de negociaciones y desencuentros por los sobrecostes en las obras de ampliación del Canal, la ACP y el GUPC, integrado por Sacyr, la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña, Constructora Urbana, lograron un acuerdo preliminar. Ahora ambas partes tienen hasta el próximo sábado por la tarde para cerrar los flecos pendientes.
“Las decisiones de las partes se dieron durante conversaciones telefónicas”, continúa la nota. “Sin embargo, todavía existen algunos temas en los que no se ha logrado concordancia”, advierte. Entre los detalles por pactar definitivamente están “las fechas de entregas de las compuertas, cronograma de ejecución, calendario de repago de moratoria y otros aspectos claves en el desarrollo del proyecto”, explica el comunicado de la ACP.
Tras meses de diferencias, el desencuentro financiero estalló el 1 de enero, cuando el consorcio de constructoras anunció que el 20 de enero suspendería los trabajos si la Autoridad del Canal se negaba a pagarle 1.600 millones de dólares (1.200 millones de euros) que le faltan en sus flujos de caja por gastos adicionales imprevistos en la construcción de las esclusas para expandir la ruta.
La ACP rechazó el ultimátum. El primer plazo se cumplió sin arreglo, pero las negociaciones continuaron con un nuevo límite: el 31 de enero. El segundo ultimátum volvió a aplazarse. Esta vez hasta el 4 de febrero. Tampoco hubo acuerdo y las obras de ampliación se detuvieron al día siguiente.
Tras ganar en 2009 la licitación para edificar las esclusas de la expansión de la vía acuática, con una oferta de 3.118 millones de dólares (2.267 millones de euros), y firmar un contrato ese mismo año para iniciar las labores, el consorcio se comprometió a concluirlas en octubre de 2014. Pero en 2012 surgieron los primeros retrasos y el plazo se alargó a junio de 2015.
El retraso hará que Panamá no pueda ofrecer y vender los servicios de las nuevas esclusas a los buques de mayor tamaño que los que actualmente pueden transitar por la ruta, inaugurada en 1914 por Estados Unidos, que empezó a construirla en 1904. La vía y sus zonas aledañas, que inicialmente fueron asumidas con un control a perpetuidad de Washington, fueron entregadas a la plena soberanía de Panamá el 31 de diciembre de 1999. Pese a la crisis, las viejas esclusas del paso centenario han seguido operando con total normalidad.(DominicanaDigital.net)