Presidente chino de gira por América Latina
PORTADA 6:20
China.-El presidente chino Xi
Jinping inicia una gira latinoamericana que lo llevará a Brasil, Venezuela,
Cuba y Argentina.
En tiempos en que el sector manufacturero made
in Chinaestá dando muestras de declive (o acaso por eso), el flujo
de dinero proveniente del gigante asiático hacia América Latina sigue siendo
fuerte y caudaloso.
Y no
parece que esto vaya a parar en lo inmediato: al igual que en África o el este
de Asia, donde China tiene importantes inversiones, América Latina le está
dando acceso a materias primas necesarias para impulsar su crecimiento.
Estas inversiones le han
ayudado, además, a afianzar su influencia internacional.
Un estudio realizado
recientemente por Naciones Unidas predice que para 2016 China desplazará a la
Unión Europea como el segundo socio comercial de Latinoamérica, detrás de
Estados Unidos.
Y según
un artículo publicado en enero en China Policy Review, en 15
años China superará a Estados Unidos como en el mayor socio comercial de
Latinoamerica.
Venezuela le suministra
unos 626.000 barriles diarios de petróleo a China.
Hoy
China es el principal socio comercial de Brasil, Chile y Perú. Y el segundo de
países como México, Argentina y Chile.
Amenaza y oportunidad
China
es percibida por los latinoamericanos como un actor pragmático, con mayor
interés en lo económico que en lo político.
"No
están preocupados porque China vaya a aprovechar su creciente influencia en la
región para influir en las políticas locales, reclutar socios para sus
objetivos globales, o para competir con EE.UU. por posibles aliados",
dicen Hakim y Myers en su artículo.
Joe
Chi, director ejecutivo del Centro de Comercio Chino-Latinoamericano, con sede
en Miami, coincide con esta idea.
"América
Latina es importante para China fundamentalmente por dos razones: por sus
recursos naturales y por el posible mercado que se está desarrollando en la
región para los productos chinos", dice China a medios de comunicación.
Así, China compra toda la soja
que puede a Argentina. Chile, el mayor productor de cobre del mundo, destina un
tercio de su producción al gigante asiático. Venezuela en China coloca grandes
cantidades de petróleo. Perú también ofrece cobre. La cuenta sigue...
Chi
explica que básicamente las dos modalidades de inversión de China en la región
serán la compra de materia prima y el establecimiento de empresas de capital
mixto para la producción de esa materia prima.
Petróleo a borbotones
·
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Boston, hasta el
momento Venezuela, el país con las mayores reservas de petróleo del mundo, ha
recibido la mayor inversión de parte de China en Latinoamérica: unos US$50.000
millones. Esta inversión ha venido en forma de préstamos (en los China
precompró a Venezuela casi US$40.000 millones en préstamos) a ser cancelados
con petróleo.
·
En 2013, el gobierno venezolano anunció una inversión de
US$14.000 millones por poarte de Sinopec -empresa china dedicada a los
proyectos de gas, petróleo y petroquímica- para el desarrollo de un campo de la
Faja Petrolífera del Orinoco con capacidad de producción de 200.000 barriles
diarios de petróleo.
·
Ese mismo año, un consorcio que incluye dos compañías chinas
-China National Offshore Oil Corporation (CNOOC) y el fondo privado China
National Petroleum Corp. (CNPC)- ganaron los derecho para desarrollar Libra, la
mayor reserva de petróleo de Brasil (descubierta en 2010). Libra tiene un
estimado de 12.000 millones de barriles.
·
El consorcio invertirá US$500 millones en Libra. No se ha
informado cuánto de esa inversión proviene de China.
·
Igualmente, en 2013, PetroChina, una subsidiaria de CNPC,
adquirió la totalidad de activos de la subsidiaria peruana de la estatal
brasileña Petrobras por US$2.600 millones. Petrobras Energía Perú tiene tres
yacimientos petrolíferos y gasíferos en Perú.
·
En 2010 China firmó un contrato con Cuba para financiar la
expansión de la refinera petrolera de Cienfuegos. El país asiático invirtió
US$6.000 millones, la mayor que ha habido en la isla.
"También
China tiene interés en establecer a futuro fábricas en América Latina, porque
los costos de producción en China se están elevando poco a poco y llegará el
momento en el que no van a ser sostenibles", explica.
Claro
que todavía los costos de producción siguen siendo bajos en China, por lo que
el gigantesco socio representa simultáneamente una oportunidad y una amenaza
para muchas empresas de la región.
Micheline
Grings Twigger, propietaria junto con su familia de la fábrica brasileña de
zapatos Picadilly, lo explica de forma sencilla a la BBC: "Estamos
compitiendo permanentemente pues nadie puede producir zapatos con los precios
de China".
"Al
mismo tiempo es una gran oportunidad, considerando el tamaño del mercado. Sería
una locura no mirar a China como una gran mercado para nosotros", dice
Micheline.
En el
caso argentino, el economista Luis Palma Cané le dice que aunque el
comercio entre ambos países se ha cuadruplicado en los últimos años y asciende
a unos US$15.000 millones (lo que establece a China como el segundo socio comercial
de Argentina), la balanza sigue siendo desfavorable para el país sureño.
"Tenemos
US$10.000 millones de exportaciones y US$5.000 millones de importaciones.
Claramente eso nos deja con un saldo en contra de US$5.000 millones",
explica.
Ocupar el espacio de EE.UU.
Alejandro
Grisanti, jefe de Investigaciones para América Latina del banco británico
Barclays, dice que en los últimos China ha sabido sacar provecho de lo que él
califica como "una disminución del interés de Estados Unidos hacia América
Latina".
"Ese
espacio ha sido ocupado en los últimos cinco años por China", dice
Grisanti. "Vemos esto como algo bien interesante puesto que China está
buscando incrementar sus inversiones en materia prima en América Latina. Y en
eso ha sido muy agresiva".
La soja representa el
75% de las exportaciones argentinas a China.
La
presencia china en América Latina, en efecto, es palpable y está cada vez más a
la vista: hoy en día es común toparse con ejecutivos chinos caminando por las
calles de la principales ciudades latinoamericanas. En las grandes rondas de
negocios hay una notable presencia de inversionistas chinos.
Empresas chinas han establecido
sedes en la región
"Estamos compitiendo permanentemente pues nadie puede
producir zapatos con los precios de China. Al mismo tiempo es una gran
oportunidad, considerando el tamaño del mercado. "
Micheline Grings Twigger - Zapatos Picadilly
También están comenzando a
rodar con mayor frecuencia los automóviles de fabricación china.. Esto es un
ejemplo importante de la expansión de la presencia china en Latinoamérica. De
acuerdo con la consultora estadounidense AT Kearney, en 2015 las ensambladoras
chinas -de marcas como Chery, Foton, Geely y Yangtze- exportarán alrededor de
dos millones de unidades (frente a medio millón en 2011) y tres millones en
2020.
Según
la consultora, los mayores mercados de tales exportaciones son países como
Brasil, Colombia, Venezuela, Perú y Argentina. Al igual que los zapatos que le
quitan el sueño a la brasileña Micheline, los precios de estos automóviles
resultan notablemente menores: la mitad o dos tercios de los marcas
estadounidenses, europeas y japonesas ya establecidas.
Cada vez rudan más autos
chinos en Latinoamérica.
Más que comprar materia prima
Luis
Palma Cané dice que hasta el año pasado las inversiones directas chinas en la
región se orientaban básicamente hacia el comercio y la búsqueda de recursos
naturales primarios. Pero esto está cambiando, en parte.
"China tiene interés en establecer a futuro fábricas
en América Latina, porque los costos de producción en China se están elevando
poco a poco y llegará el momento en el que no van a ser sostenibles."
Joe Chi - Centro de Comercio Chino-Latinoamericano
"A
ese esquema, que no ha sido dejado de lado, se le han agregado la inversión en
obras de infraestructura, bien mediante licitaciones, bien mediante acuerdos
privados entre los gobiernos con financiación del gobierno chino y
participación de empresas chinas", explica Palma Cané.
"Con
respecto a la inversión externa, obviamente lo que está buscando es trabajo
para las empresas chinas de ingeniería, aunque también tiene una estrategia
geopolítica, que es tener un peso económico en América Latina".
En
Nicaragua, por ejemplo, China está financiando la construcción de un canal
interoceánico que vendría a competir directamente con el de Panamá.
En
junio de 2013, el gobierno del presidente Daniel Otorgo anunció la firma de un
contrato por US$40.000 millones con HKND Group, la empresa que dirige el
multimillonario de Hong Kong, Wang Jing: el monto le garantiza a China una
concesión de 50 años por los derechos de construir el canal y otros 50 años
para manejarlo.
Expertos
consideran que este canal será clave para la expansión del comercio mundial de
China.